La importancia del vino en la Grecia clásica antigua

La importancia del vino en la Grecia clásica antigua

· · · Un poco de historia

Tras el nacimiento y la expansión del vino por la media luna fértil mediterránea (ver '10 cosas que debes saber sobre el origen del vino'), la cultura del vino alcanza en el delta del Nilo tal prosperidad que algunos investigadores mantienen que los fundamentos de la economía de mercado moderna se asientan en aquel comercio vinícola del Egipto de los Faraones con sus vecinos a través del Mar Mediterráneo.
 

La siguiente etapa de la Historia del vino se desarrolla en la Grecia clásica antigua y su rastro aparece en las protohistóricas civilizaciones minoicas de la actual Creta que, gracias a sus lazos económicos y culturales con los egipcios, sirven de puente entre la Grecia arcaica y el Egipto faraónico. También es posible que la cultura del vino llegará a Grecia desde las tierras altas de Asia Menor.
 

Por las primeras fuentes documentales sobre el tema, sabemos que los griegos tomaban el vino mezclado con agua y que para su conservación y traslado usaban toneles hechos de pieles de cabras y ánforas de cerámica. Por estas mismas fuentes sabemos también que hacia la segunda mitad del segundo milenio a.C. el vino se había convertido ya en uno de los elementos importantes de la vida y de la cultura griegas: Los viñedos se extendían por toda Grecia y las Islas del Egeo eran conocidas por las civilizaciones antiguas gracias a sus vinos.
 

Quios, considerada la Burdeos de la Antigüedad, exportaba sus vinos al Egipto de los Faraones y a las civilizaciones antiguas que ocupaban los territorios de la actual Rusia. También los vinos de Tasos, Lesbos y Rodas gozaron entre sus vecinos mediterráneos de una merecida buena fama.
 

Los griegos también avanzaron mucho en las técnicas, cultivos y fermentación del vino. Teofrasto, en el siglo IV a.C., ya escribía sobre la estrecha relación entre las variedades de uva, las características del suelo, y el clima de la situación de los viñedos. Además, llevaron la cultura del vino a sus nuevas colonias que se expandieron por el Mar Mediterráneo durante los primeros siglos del primer milenio a.C.
 

De este modo, las nuevas colonias griegas mediterráneas se convierten en los nuevos centros vitivinícolas de la Antigüedad Clásica: Siracusa y Catania, en Sicilia; la Magna Grecia (Ancona, Nápoles, Reggio Calabria y Tarento), en el sur de Italia;  Massilia (Marsella) y Nikaia (Niza), en el sur de Francia; Emporio (Ampurias), Rode (Rosas), Dianio (Denia), Alonis (¿Villajoyosa?), Eio (¿Hellín?) y Mainake (¿Málaga?) en el levante español. Para los griegos Italia meridional se convierte en su 'oinotria', su tierra del vino.
 

La importancia del vino en Grecia cobra su máxima expresión cuando se le atribuye un origen divino y su creador Dioniso pasa a ser uno más del panteón helénico del Monte Olimpo. Según la mitología griega es hijo de Zeus y Sémele, nieto de Harmonía y bisnieto de Afrodita, aunque otras versiones afirmaban que era hijo de Zeus y Perséfone. Dioniso es originario de Asia Menor y allí creó la cepa y con su divino poder para fertilizarla hizo brotar del suelo leche, miel y vino.
 

Gracias a la exuberante vegetación que generó esta germinación divina y a la embriagadora acción del vino, Dioniso liberó a los hombres de sus preocupaciones diarias. Dioniso paso al panteón romano como Baco 'Eleuterio', 'el libertador', por librar a los hombres de sus pesares mediante la locura, el éxtasis o el vino. Con el Imperio Romano la cultura del vino alcanzaría su primer momento de esplendor... ¡Pero esa es una historia para otro artículo!

Acerca del autor
Juanfer Puebla Tejerino
Juanfer Puebla Bloguero y amante del vino

Pionero en el marketing de contenidos y las comunidades virtuales, este poeta por necesidad, historiador vocacional y gestor cultural desde hace más de 30 años, cambió la pluma por el teclado y desde entonces ha escrito miles de artículos en la web sobre diferentes temas, aprovechando no sólo sus conocimientos teóricos sino también sus experiencias prácticas en los locales y bares del centro de Madrid.